¡Queremos un Christian Grey!

Todas soñamos con nuestro hombre ideal. Las expectativas que creamos varía en cada una de nosotras, pero casi siempre coincidimos con varios aspectos. Seguramente es por culpa de Disney que nos hace creer que existen príncipes azules, o de Hollywood que pinta sus protagonistas como hombres perfectos, o tal vez de la literatura que pone a sus personajes como héroes de corazones. Sea de quien sea la culpa, la realidad es que muchas tenemos expectativas altas de lo que queremos en un hombre.

Hace poco termine de leer la trilogía de 50 sombras (Fifty Shades) la cual nos cuenta la trillada historia de la mujer "insignificante" sin gran belleza o atributos físicos que se enamora de un magnate de los negocios, millonario, extremadamente bello y, con un gran punto a su favor, es un dios del sexo. Pues sí, no sólo lo ponen como un príncipe, si no que también sabe como hacer que una mujer experimente los más deliciosos orgasmos, es algo así como el verdadero hombre perfecto. Obviamente el también se enamora de ella y viven su tórrido romance.

A lo que quiero llegar es que, nosotras queremos eso... ;-) No sólo las expectativas que tengo en los hombres han cambiado, si no que también las expectativas que tengo en el acto sexual se han modificado. Seamos sinceras, no estaría para nada mal tener a nuestro lado a un hombre extremadamente guapo, extremadamente millonario, que te ame con locura, que sus defectos lo hagan más tierno de lo que ya es, y que sepa como hacerte el amor de una forma alucinante. Si, definitivamente queremos, merecemos algo así... Christian Grey puede ser algo un poco tóxico, pero sus principales cualidades derriban a sus pies a cualquier mujer (bueno, a la mayoría). Sobre todo en el ámbito sexual, Dios, es perfecto... Muchos hombres que no saben complacer a una mujer y sólo buscan su propia satisfacción personal deberían sacar un tiempo y leerse estos libros. ¡Se sorprenderán lo mucho que pueden aprender! ;-)

Es increíble como un libro puede cambiar de perspectiva tu visión acerca de la sexualidad y tu satisfacción. Y más increíble es ver como esa descripción de un hombre "perfecto" esta tan alejada de la realidad :-(

Bueno, pero no nos quedemos perdidas en un mundo irreal. Lo importante es saber lo que quieres y mereces, lo que te haga feliz en cada ámbito de tu vida. Tal vez no será un Christian Grey, pero será el perfecto para ti... Aún así, soñar no cuesta nada. ;-)

¡Masturbación! Admitelo, lo haces...

Bueno, tal vez no lo prácticas regularmente, pero tienes que admitir que lo has intentado. Definitivamente, es un acto total y absolutamente normal, en que te aprendes a conocer tu cuerpo, lo que te gusta, lo que te satisface, y lo que no. Me parece sumamente divertido hablar de la masturbación y que siempre alguien se cohiba de admitir que sí lo hace. Obviamente a los hombres les resulta más fácil declarar abiertamente que lo hacen, mientras que las mujeres (casi siempre, y la mayoría de ellas) se ruborizan, se ríen y nunca admiten que lo practican, o que al menos lo han intentado... ¿Por qué será?

No lo entiendo. Seguramente será por culpa de los estándares que nos a impuesto la sociedad, donde el hombre es el "macho que se respeta" y puede hacerlo sin pudor, mientras que las mujeres somos las inocentes princesas, damitas, que debemos esperar al príncipe azul, ademas, esas cosas no las hacen las señoritas. ¡Por Favor! Estas damitas, señoritas y princesas también sentimos y padecemos... Por supuesto que también nos masturbamos.

Ya es hora de que entendamos que no hay nada más personal que masturbarse, tener sexo contigo mismo. Así te conoces y sabes exactamente lo que quieres y deseas cuando vallas a practicar el acto sexual. Chicas, masturbarse no es malo, es divertido, es relajante, admitanlo! ;-)

La sexualidad, la que cargamos siempre y aveces nos avergüenza admitir que la tenemos, que la llevamos, que la sentimos. Rompamos con esas barreras que nos detienen y nos impiden hablar abiertamente las cosas como son... La masturbación no es mala, es normal y es gratificante... ¡No sientan miedo y mucho menos asco por ella! Practíquenla! ;-)